Entrada destacada

¿Qué es la psicoterapia?

"Conozca todas las teorías. Domine todas las técnicas, pero al tocar un alma humana sea apenas otra alma humana" Carl Gustav ...

miércoles, 31 de diciembre de 2014

Mi deseo para éste y el resto de los años.


Último día del año, un día para mirar atrás y sonreír por todo aquello que nos ha brindado este 2014, un día para fabricar cambios, transformar lamentos por celebraciones, excusas por acciones y fracasos por victorias. Sin duda, un día para vivirlo como si fuera el último, porque de hecho, todos pueden ser el último. Un día para repasar todo lo que hemos aprendido y todo lo que hemos llorado y reído.
 
He aprendido que lo verdaderamente esencial, no son las cosas que tengo alrededor, sino la personas que me acompañan en mi camino. He aprendido que lo más importante no es lo que sucede, sino mi actitud ante las cosas que suceden. He aprendido que siempre debo despedirme de las personas que amo con mis mejores palabras, pues podría ser la última vez que los veo. He aprendido que puedo llegar tan lejos como me proponga. He aprendido que yo soy la única responsable de mis actos. He aprendido que la verdadera amistad y el verdadero amor continúan creciendo a pesar de la distancia. Y he aprendido que las casualidades no existen.
 
El mayor regalo de este año ha sido poder compartir mi vida con una personita que llegó sin avisar para hacerme muy feliz. Una persona espontánea, que vive el momento, con un encanto natural fuera de serie... Una niña maravillosa. Para ella todo es interesante y excitante. Toca, mira, explora, experimenta, vuelve a tocar... y todo ello de una forma muy optimista. Ella cree que el mundo es su amigo, tiene esperanza, cree que todo es posible y que todo lo puede conseguir. Nunca se rinde y siempre, siempre está riendo. Ve humor en toda clase de cosas, ya sean reales, imaginarias o creadas por ella misma, la cuestión es sonreír. El mayor de sus encantos es su ingenuidad, esa inocencia innata que le permite vivir el ahora de una manera natural. Y esa predisposición al amor y al afecto que me hace ser todavía más humana. Un regalo eterno.
 
Para este 2015 deseo que todos podamos recuperar a aquel niño mágico que reside en cada uno de nosotros, aquel niño que cree que con ciertas palabras, gestos o comportamientos puede cambiar la realidad. Porque la realidad es que todo puede ser mejor de ahora en adelante, sin miedos que te paralicen podrás enfrentar todos tus retos, con valentía y dando lo mejor de ti. Porque cada segundo es una nueva oportunidad para demostrar tu talento y seguir explorando. Todo es posible y está ahí delante.
 
Y ese, es mi único deseo. 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario